martes, 24 de febrero de 2015

Escalando...




   De nuevo con taquicardias, demasiado estrés para mi cuerpo. Tomo aire profundamente he intento dejar la mente en blanco... Inspiro, espiro, inspiro, espiro... Pero no funciona. 

    Tomo mi cabeza entre mis manos, y las yemas con vida propia empiezan a masajear y presionar el cuero cabelludo contra el cráneo destruido de tantas vueltas que da el cerebro intentando escapar, causándome un dolor intenso, que pretende escabullirse a través de mis ojos.

    Y por eso, decido cerrarlos, pensando que así llegará la calma... Y tras un fugaz instante en el que siento el olor a lumbre en un refugio perdido, de un invierno cualquiera, en los que me perdía por las montañas sin ninguna preocupación, comienzan a pasearse sin pudor, una tras otra, la responsabilidad, el nerviosismo, el recelo, las manías, el miedo, los fantasmas, la obligación y el deber.

    Y mi corazón se lanza al vacío sujetado por un hilo de cordura que consigue que siga con vida y vuelva a calzarme los gatos para trepar asegurando el éxito de mi futuro.

viernes, 20 de febrero de 2015

Marea...

    Hay días que te quieren volver loco, cuando tienes un fin claro, te aturden con miles de palabras, con desánimos, con un "no podrás", sólo sacan pegas y ven lo negativo (aunque ya hayas valorado consecuencias). 

    Somos libres, barajamos las opciones, decidimos sobre ellas y realizamos sueños.


Aturdidos los sentidos
se paraliza la libertad.


Marea de nubes
cubren tu ser disperso
en pedazos de olvido.

Recomponer cada fragmento
de un ser confuso,
es tarea difícil, quizá.

Ser, tu eres, busca la luz
en la oscuridad del momento
y álzate pedazo a pedazo,
elige vivir.

jueves, 19 de febrero de 2015

19 de Febrero...

    Como ya sabréis, hoy es mi cumpleaños (gracias por las felicitaciones, siempre me hacen mucha ilusión jejej ) El número no es redondo, puesto que son 39 años, y no 40, como me están avanzando durante todo el día. El cambio de números siempre aterra un poco, no sólo por el paso del tiempo, sino por lo que ha significado para mi. Recuerdo los 10, los 20 y, los 29 y 30 en especial por ser un desastre vital inevitable, que algún día contaré.

     Ahora me encuentro en un momento muy dulce y especial en todos los sentidos y el cumplir años me alegra enormente.

     

    Hoy os dejo esta historia:



    Ella, tan joven, tan alocada, con su grupo de amigas, todas uniformadas, se disponían a salir del colegio de monjas, donde estudiaban, con su carpeta entre los brazos y la mochila a sus espaldas. 
    Surgían risas espontáneas al ver el grupo de chicos que siempre estaban en la esquina, fumando y alardeando de sus fechorías.
    Uno de ellos se fijó en Ella, en ese momento, se enamoró sin saber que ese no era ningún príncipe y lo que aparentemente parecía malo, eso que tanto le atraía, era así, realmente malo.
    Ella se dejó llevar, tanto, que tuvo que armarse de valor, acercarse hasta su madre y contarle que estaba embarazada con tan sólo 17 años. 
    Y así, llegó la boda. La barriga crecía y la relación se afianzaba a base de mentiras a espaldas de Ella. Recién cumplidos sus 18 años, llegó una nueva vida con una gran sonrisa, que la protegería, no sin sentir miedo, de la persona que hizo sufrir profundamente a su madre y a su familia.
    Por suerte, esa nueva personita y su madre, pasados ocho años conocieron a un príncipe azul al que por fin pudo llamar Amor Verdadero y Papá.

lunes, 16 de febrero de 2015

Seguir Viviendo...

   Podemos recordar algún amor fallido en el que sientes que la vida no tiene significado. Pero la vida sigue y sigue teniendo sentido, el que tú le des.

    Soy de la creencia que hay que buscar a cualquier situación su lado positivo, porque lo hay, sólo hay que buscarlo, aunque existan millones de rinconcitos donde se pueda esconder y te lleve algo de tiempo.



Toqué fondo, 
posé mis manos,
mis piernas,
todo mi cuerpo,
hasta dejar caer
mi boca
en el suelo frío,
asfaltado por el desalojo
de tu cuerpo esculpido en mármol.

Pasaron días hasta
que pude girar sobre mi cuerpo
para sentir el manto cálido del sol, 
el paraguas de gotas de lluvia
y los ojos atentos, brillantes,
 de cada estrella,
que formaban sonrisas dulces
creando nuevas constelaciones,
logrando alzar mis manos
para intentar acariciarlas.

Me levanté,
caminé y seguí viviendo.

 

jueves, 12 de febrero de 2015

Número 100... GRACIAS

    Después de un mes complicado ( he estado enferma, ausente por vacaciones de placer y algo de negocios, mucho trabajo y algo de ansiedad, terrores nocturnos y deambular por el pasillo de un cuarto a otro, peque absorve tiempo y repartiendo amor y sonrisas...) quiero dedicaros esta entrada: la entrada número 100.  

 

     Quién me iba a decir que llegaría a compartir tantas cosas, personales y fantásticas, con todos vosotros. Quién me iba a decir, que existían personas como yo, con los mismos deseos de escribir, de leer y ser leídos, que comparten una parte de si mismos en cada uno de los blogs que existen a mi alrededor de esta gran comunidad que nos une a través del Google+.


    He recibido menciones muy especiales, comentarios que llegan al espíritu y muchos +1 que dan sentido a la expresión, a las palabras, a mis palabras, desde cualquier parte del mundo. Estoy en paz conmigo misma desde que empecé a abrir mi corazón y mi alma, por eso hoy, a cada uno de vosotros que os acercais hasta mi, en cualquier forma y desde cualquier lugar, os QUIERO DAR LAS GRACIAS.


 

GRACIAS POR COMPARTIR

el valioso tiempo

de tu vida ajetreada,

con mis palabras, conmigo.

 

GRACIAS POR DETENERTE

en leer estas palabras,

dulces, amargas,

cariñosas, sinceras,

a veces odiosas,

y fantasiosas.

 

GRACIAS POR ESTAR

 y dejar tú huella imborrable

en mis pensamientos, 

dentro de mi,

haciendo camino.

 

GRACIAS POR CADA REGALO

que me brindas

con tan sólo sentir la presencia

de tus ojos, de tu alma.

 

GRACIAS.


Un fuerte abrazo y una gran sonrisa.

martes, 10 de febrero de 2015

Corazón de Sapo...

    Porque en algún momento de la vida, encuentras a la persona que te complementa.






Paseando en mi universo,
rodeada de inmensos árboles,
de un verde oxigenado,
que cuidan del riachuelo
donde navega la calma.

Grandes flores,
que crecen hasta la altura
de mi rostro sonrosado,
de tanto soñar mientras
recorro el sendero vital.

Alejo la mirada hacia 
el infinito en el que vivo,
girando sobre mi
pero no me abruma,
me arropan las hojas
que volando, rozan mi piel,
y me recuerdan
que no transito sola.

Aspiro profundo,
porque te encontré.
Mi pequeño corazón 
de sapo.


lunes, 9 de febrero de 2015

Disfraz de Serpiente...

 A veces, las cosas no son lo que parecen.




Esa voz melodiosa,
que con susurros
hacía bailar mis sentidos
en una danza apasionada,
alejándome de la realidad.

 Mis ojos cegados
por el roce de tu piel,
elevándome sin vértigo
hasta tu universo.

Fue ahí donde
 clavaste tu lengua,
sin darte cuenta,
que cada escama tuya,
formaba mi piel,
envenenándote hasta la muerte.